Cuidados del césped natural. Consejos sobre mantenimiento del césped natural. Aspectos a tener en cuenta en materia de abonos, riegos, árboles, suelo y animales.
Existen muchos jardines que se encuentran en zonas soleadas, otros que se encuentran en zonas sombrías y otros jardines, ambas zonas. Pues bien, debemos elegir aquella variedad que mejor se adapta tanto a su zona geográfica como al clima del área en la que resida. En cuanto aquél césped natural que se encuentre en zonas soleadas debemos procurar no segarlo demasiado puesto que podría abrasarlo. Además, no debemos regarlo en horas de sol porque evaporaría el agua. En cualquier caso, existen variedades como la bermuda o el paspalum que no soportan bien el frío y en los meses de invierno cambia de color al amarillo. Sin embargo, las zonas sombrías tienen un hándicap y es que no recibe luz solar durante el día. Para ello, la festuca y el ray grass son un tipo de césped resistente a estas zonas sin sol. Desde Tepes Julián recomendamos que se nutra al césped natural de más fósforo y potasio y menos de nitrógeno.
Por otra parte, en verano las lluvias suelen ser mínimas y por ello debemos seguir unas pautas para el disfrute de nuestro jardín de casa. Así, procurad regar el césped natural en su justa medida. Es preferible darle menos tiempo de riego con más frecuencia. También, debemos procurar no regar en horas de sol. Las mejores horas para realizar el riego es a primeras horas de la mañana y por la tarde. Aconsejamos, también, realizar las técnicas de aireación para que drene mejor el agua y se pueda oxigenar. Ajustemos el riego programado para poder ahorrar agua y dinero.
En cuanto a los orines de los animales pueden afectar al jardín porque se formen redondeles amarillentos imposibles de recuperar. Por tanto, procurad que los animales no hagan sus necesidades en el césped natural. Otra recomendación es nutrir al césped natural de abono complejo pero en su justa dosis, es decir, un exceso de abono daría lugar a quemaduras. Por el contrario, la falta de ello produciría la desnutrición de las plantas ornamentales. Así, consultemos la dosis recomendada por parte de los fabricantes. En Tepes Julián aconsejamos un NPK 12-11-18 y en una proporción de unos 2,5 kg por cada 100 metros cuadrados. Lo mismo sucede con los herbicidas para eliminar las malas hierbas.
Por último, la abundancia del agua provocará enfermedades y hongos en el césped natural en tepes. Así, debemos vigilar que no se formen charcos y gestionar el riego de forma correcta. También, la mala calidad de los suelos hace que el césped no enraíce perfectamente y, además, su supervivencia corra peligro. Así, el crecimiento puede ser nulo. En suelos de mejor calidad, aconsejamos que se realicen las tareas de aireación y escarificación para que drenaje sea mejor. Los árboles compiten en algunos casos con el césped natural. Así, debemos tenerlo continuamente podados.